Gestionar la actividad, los clientes, propiedades y contactos de forma efectiva debe ser una prioridad para toda agencia inmobiliaria, sobre todo en los últimos tiempos cuando manejar las herramientas tecnológicas ha dejado de ser una opción para convertirse en una necesidad. Por ello el uso de los CRM (Customer Relationship Management) es cada vez más frecuente. Un software de gestión adecuado puede aumentar la eficiencia y eficacia de los agentes, permitiéndoles coordinar toda su actividad e incluso mantener en concordancia el trabajo en varias oficinas.
Para elegir el software adecuado, lo primero a tener en cuenta son los servicios que es capaz de ofrecerte. En general, un buen CRM debería encargarse de almacenar y organizar contactos, gestionar clientes potenciales, medir la rentabilidad tras una inversión, generar, gestionar y revisar estadísticas, mantenerse al pendiente de los propietarios, publicar las propiedades, controlar llamadas, permitir y facilitar la comunicación directa agente-cliente y brindar acceso a la Bolsa Inmobiliaria compartida.
Gracias a todas estas facilidades, estas herramientas no solo permiten la organización y administración del trabajo, sino que además ofrecen un notable aumento en las oportunidades y una importante optimización de resultados para los profesionales en el área inmobiliaria que quieran aventurarse en este ámbito.
Pero el contar con estos servicios no es lo único que debe tenerse presente a la hora de elegir el software adecuado, pues la competencia en el mercado es tal que ya la mayoría de estos ofrecen estas funciones y muchas otras más. En consecuencia, es importante tomar en consideración otros aspectos, como el coste de mantenimiento y las facilidades de manejo de la plataforma, pues su aprendizaje también puede llegar a requerir una inversión alta de tiempo y dedicación.
La rapidez y calidad con la que se desarrollan cada una de sus funciones, así como la estabilidad con la que pueda contar, son también aspectos relevantes para quien desea contratar un CRM. Finalmente, es bueno poner un énfasis especial en el soporte técnico y el trato que brindan a sus usuarios a través de este. Una respuesta profesional y eficaz que atienda de forma personalizada las dificultades y exigencias de cada cliente suele ser el punto cumbre a la hora de declinar por uno u otro software. Ya que, si este recurso logra propiciar un clima de confianza en la comunicación con su clientela, puede ser la clave para sacarle el mayor provecho.